Debilidades
Los INFJ poseen un alto grado de empatía, lo que los lleva a ver siempre lo mejor en los demás. Debido a su increíble empatía, los INFJ a veces pueden confiar demasiado en los demás. Esto puede facilitar que otros decepcionen a los INFJ o se aprovechen de ellos.
Además, los INFJ realmente valoran sus relaciones con los demás, y a menudo pueden poner las necesidades de los demás antes que las suyas. Debido a esto, los INFJ deben tener cuidado de no tomar decisiones y definir sus prioridades basándose únicamente en lo que los demás desean; esto puede resultar en descuidar sus propias necesidades y perder el sentido de propósito. Es crítico que los INFJ no sacrifiquen su propio bienestar y aspiraciones para ayudar a otros. Pueden encontrarse cansados, estresados y desgastados.
Aunque tienen creencias muy arraigadas, los INFJ a menudo tienen dificultades para revelar sus verdaderas identidades y valores. Son personas muy profundas y complejas. Como los INFJ son naturales para interactuar y comprender a los demás, pueden tener interacciones "camaleónicas" en lugar de revelar su verdadero yo.
Finalmente, los INFJ a menudo buscan las opiniones de los demás, pero pueden tener dificultades para aceptar las críticas. Pueden volverse dependientes de la aprobación de otros para validar su autoestima.